CALVIN KELER (OUTRO)

Todo es como en la vida: un poco vergonzoso, un poco orgulloso y realmente aterrador solo cuando te das cuenta de que madurar no es algo que ocurre de repente. Se acerca sigilosamente: con las primeras monedas robadas del bolso de mamá, con el primer fanatismo por los ídolos, con la primera decepción en ellos mismos. Entre TikTok, kasą y McDonald’s, hay una pequeña sinceridad: no es un héroe, ni un mesías, solo un chico que sobrevivió, grabó y no tuvo miedo de admitir que a veces la vida es una mierda.

Cada estrofa es como una conversación contigo mismo en el baño, donde en lugar de un espejo hay un micrófono. Tonterías, enfado, gratitud y un poco de felicidad, todo ello mezclado con una honestidad que rara vez se escucha en los éxitos. Y tampoco hace falta que suene bonito. Lo importante es que sea auténtico, aunque sea con un toque de ironía y ojeras.