PILLOW

La ruidosa ciudad fuera de la ventana, los destellos de los faros, el motor cansado... y dentro, la misma sensación: todo ruge, todo se mueve, no hay paz. El dinero fluye como la gasolina, rápido y con un regusto de inquietud. Parece que lo tienes todo: velocidad, éxito, incluso amor con aroma a perfumes caros. Pero bajo ese brillo hay una cabeza rota, noches de insomnio y una extraña ternura de la que no puedes escapar.

La canción es como un disparo de escape: ruidosa, brusca, pero con un eco humano. En ella hay una nostalgia por lo simple: que alguien no «quiera algo», sino que simplemente esté cerca. Entre líneas hay una sincera confesión de que, detrás del brillo y la fuerza, a menudo se esconde el cansancio. Ese cansancio que te hace querer simplemente acostarte, apagar la luz y exhalar por primera vez en mucho tiempo.