Descripción
La lluvia golpea la ventana y, con ella, regresan las promesas que el tiempo había borrado hace tiempo. Un rostro del pasado se refleja en las gotas del cristal, como un fantasma que no se va. Parece que la tormenta ha pasado hace tiempo, pero por dentro todo sigue girando en un torbellino: las palabras «nunca te abandonaré» resuenan como un eco, como un reproche. La canción es como un aguacero en el corazón: parece que quieres esconderte, pero cada gota te recuerda con más fuerza que no has conseguido olvidar.
Letra y traducción
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