Quando

La respiración, como si fuera la culpable de todos los males. Se desvía, tiembla, se aferra al aire, como si intentara retener algo que hace mucho que se le escapa de las manos. En cada nota hay una sensación de fragilidad, como la de una persona que al mismo tiempo quiere vivir y tiene miedo de respirar demasiado profundo para no volver a lastimar. El amor aquí no es sobre romance, es sobre instinto, sobre puños apretados y la estúpida terquedad de no dejar ir. Cada palabra suena como una confesión de imperfección. Dicen que sí, que todo esto es por nuestra culpa: por el cuerpo, por el silencio, por el deseo de ser comprendidos por alguien, aunque sea una vez. Y cuanto más fuerte es el abrazo, más doloroso es el toque. Es simple: el amor y el dolor, como la inhalación y la exhalación, no existen el uno sin el otro.