Эмигрант

Como si una película vieja se hubiera atascado en la grabadora y el mundo, crujiendo, hubiera retrocedido. El tiempo se estiró, perdiendo sus contornos, y los sonidos se suavizaron, como si alguien hubiera cubierto el corazón cansado con una manta de lana. El anciano en la puerta espera algo, tal vez el cielo, tal vez el último autobús que nunca llega. Cada palabra es como un paso descalzo sobre el fino hielo de la memoria: se oye el crujido, pero sigues adelante de todos modos. Un emigrante que no busca un país, sino la frontera entre el sueño y la realidad. Confundiendo la hora y el mundo, parece despertar en un cuerpo extraño, donde incluso la respiración suena fuera de lugar. La música fluye espesa como la leche, lenta, con un regusto de antiguos lamentos. Y cuando las últimas notas se disuelven, queda una extraña sensación como si alguien se hubiera ido, pero hubiera olvidado apagar la luz. Idea: K. Avenirov/M. Churakov. Director: V. Priduvalov. Operador: A. Parek.