Manic!

Una calle nocturna con un libre flujo de ritmos: como si alguien hubiera encendido el amplificador al máximo y hubiera lanzado al mundo una oleada de jactancia ardiente y sarcasmo melancólico. La voz corta, como una conversación a medio tono, y detrás de ella, un ritmo que no pide permiso: moverse o quedarse quieto. En algún lugar entre la esquina y el club nace la sensación de que el escenario no es un lugar para comportamientos ejemplares, sino un borrador para pensamientos audaces y controvertidos.

Las palabras vuelan sin censura: la provocación, las amenazas y la amarga sinceridad se mezclan en una tormenta de emociones. En el texto no hay piedad y casi no hay reglas, pero hay honestidad: alguien presenta la cuenta al mundo y no oculta su irritación, su amor por el riesgo y su deseo de poseer su propio espacio. Un poco aterrador, a veces absurdo, pero aún más humano por ello, como una nota escrita en la última página de un cuaderno y dejada en la barra de un bar entre susurros de aplausos.

Productor: JPEGMAFIA

Productor: Alex Guz