Tu Boda

Una tormenta de sentimientos en una lenta danza al borde del sueño y la locura. Cada palabra suena como un juramento hecho al viento frío, donde el amor y los celos se mezclan con el aroma del incienso y la sangre. La escena parece congelada entre el altar y el infierno: un vestido blanco, manchas rojas, cien invitados... y nadie puede apartar la mirada.

Aquí no hay lugar para la ternura, solo el deseo obstinado de bailar hasta el final, incluso si la música conduce directamente al abismo. Todo está a punto de romperse: el pulso late demasiado rápido, la respiración se acelera, los recuerdos destellan como viejos flashes en una película fotográfica. Y, sin embargo, bajo esta locura se percibe una extraña calidez: el reconocimiento de que el amor no salvó, pero se convirtió en una historia digna de un último brindis.