ПАНАМЕРА

Una mezcla de brillo, ironía y ligera locura, como una noche en la que la ciudad brilla con sus escaparates y la música suena con un bajo que se encuentra entre la broma y la seducción. Aquí todo gira en torno al juego: alguien se sienta en un Panamera, alguien finge que no se deja llevar, pero al final ambos se dejan llevar, solo que por cosas diferentes.

En esta historia no hay moral, solo ritmo. Las chispas se reflejan en el cromado del coche, los pensamientos están entre la tumbona y la luz de neón, y las palabras fluyen con esa entonación en la que nadie habla en serio, pero todos lo entienden todo. La noche, el funk, el coqueteo y un poco de diversión descarada: la fórmula perfecta para el caos al son del motor.