soul jazz

El soul jazz es una dirección que surgió en la intersección del jazz y el rhythm and blues. Recibió un amplio reconocimiento en los Estados Unidos a finales de la década de 1950 y especialmente en la década de 1960. El soul jazz atrae a los oyentes no solo por su complejidad intelectual, sino también por su energía física: su bailabilidad, sensualidad y melodías reconocibles. Este estilo ocupó un nicho especial entre el jazz para entendidos y la música urbana popular.

Los orígenes del soul jazz están estrechamente ligados al hard bop, una forma de jazz que se formó en Nueva York a mediados de la década de 1950. Los músicos que buscaban devolverle al jazz el "alma de la calle" comenzaron a inspirarse en los corales de la iglesia. En la década de 1960, el movimiento se extendió por las ciudades de la costa este, especialmente en Filadelfia, Detroit y Baltimore.

Musicalmente, el soul-jazz se construye alrededor de un groove cálido y rítmicamente elástico. Los tempos son generalmente moderados o medios, y el ritmo se enfatiza con acentos funk. La interpretación en el soul jazz es menos académica que en el bebop: se hace hincapié en la sensación de "swing" y la entrega emocional. La voz se utiliza raramente, sin embargo, las partes instrumentales a menudo imitan la manera de cantar.

El soul jazz obtuvo reconocimiento no solo entre los músicos, sino también entre el público en general. En la década de 1960, muchos discos llegaron a las listas de Billboard Jazz y R&B, y los conciertos de tríos de órgano llenaban salas en los clubes. El género influyó en cantantes de soul como Ray Charles y Donny Hathaway, así como en los productores de acid jazz de la década de 1990. Hoy en día, el soul jazz sigue siendo relevante como un estilo que ha logrado combinar la espontaneidad de la improvisación jazzística con la franqueza y calidez del rhythm and blues. Su legado se escucha en el neo-soul, el nu-jazz y los experimentos instrumentales de R&B del siglo XXI.